cable de fibra óptica enterrado
El cable de fibra óptica enterrado es una infraestructura de telecomunicaciones de vanguardia, diseñada para transmitir datos a lo largo de muchos kilómetros con una velocidad y fiabilidad sin precedentes. Estos cables suelen consistir en uno o más fibras de vidrio en su núcleo, rodeadas por capas de materiales protectores. Sus funciones incluyen la transmisión de señales de internet, telefonía y servicios de televisión. Los parámetros tecnológicos del cable de fibra óptica enterrado incluyen su alta capacidad de ancho de banda, proporcionando tasas rápidas de posesión de datos y resistencia a la interferencia electromagnética que mantiene la calidad de la señal intacta. Estos cables se entierran frecuentemente bajo tierra, donde están protegidos de condiciones climáticas adversas y daños físicos. Las áreas donde pueden encontrarse abarcan varios sectores, incluyendo las telecomunicaciones, la atención médica, la educación o los servicios gubernamentales, facilitando el flujo fluido de información alrededor del mundo.