Fácil de instalar y mantener
El cierre conjunto OFC tiene en cuenta la facilidad de instalación y mantenimiento. Un diseño fácil de usar facilita el enrutamiento rápido de cables, su terminación o la realización de empalmes y organiza todo esto con una velocidad notable en comparación con lo que estamos acostumbrados. Lo que esto significa es que el proceso de implementación se lleva a cabo en menos tiempo, y a costos laborales más bajos que los habituales, además de ser más flexible. Además, el diseño modular hace que las futuras actualizaciones o reparaciones sean un proceso simple. Esto no solo significa que no hay necesidad de descartar una instalación completamente nueva cuando se expande la red, sino que también tiene implicaciones para mantener parte de un sistema cuando ciertas secciones se ponen en servicio, lo que beneficia a la innovación y a las economías de desarrollo. ¡El soporte técnico ha avanzado mucho desde entonces! Esto ahorra tiempo y energía, y como resultado, los efectos generales son obvios.